sábado, 13 de abril de 2013

INVENTARIO


INVENTARIO

El viento sin prisa,
en el portal sublevado
les puso a resguardo
su primer susurro,
y fue la brisa invisible
que les sedujo el apetito
desde aquel infierno
que se redimía
en la sed de sus ojos,
ello,  
consta en el inventario.
Unos pasos más allá
el living
los guarece a quemarropa
de aquellas oportunidades
de supervivencia
sin inmunidad
y de resistencia
sin indiferencia,
donde se desprendían
de la soledad
en las respuestas purificadas
nacidas de la afinidad
entre el azar
y la verdad,
y la poesía
era un ida y vuelta
en la sombra del fuego
que delineaba sus curvas
desde la transparencia
de sus acordes y ritmos,
ello, 
consigna el inventario.
Por lo pronto,
la mesa de la cocina
huele
a recorrido extenuados
y a certezas
sin adulterios
donde la oportunidad
los enmudeció
en la exoneración
sin testamento,
y donde la saliva
los desmemorió
en los ecos
de las intenciones
sin espera.
ello,  también
manifiesta el inventario.
Más acá
el dormitorio
en celo diario
les resguarda todas
las cicatrices extenuadas
donde lo causal
de la casualidad
los equilibraba
en la purificación
de todas las evidencias
y de todo el arte válido
en el desnudo
imperio de coincidir,
ello,  también
lo atestigua el inventario.
Más, afuera,
en el patio
la luna
era el techo
que los sostenía
del vértigo
y de la inapetencia
de sobrevivir
sin ardores,
y  la noche
los moría
en la contraseña
de sus pupilas
desde el escenario
sin concluir
y sin procrear estrellas,
también ello, 
refleja el inventario.
Pero,
en el inventario final
de sus residencias,
no todo está
celosamente guardado,
en el catálogo concluyente
de la coexistencia
el amor,
no ha quedado inventariado.




pintura Antonio Correa

No hay comentarios:

Publicar un comentario