PASA LA NOCHE
Pasa rozándome
la noche
como si todo
pasara
como si nada
pasara,
se acuesta a
mis pies
despoblando lo
recóndito del misterio
donde se viven
y se ansían sin prisas
todas las
miserias y los quizás,
todas las
glorias y el azar,
pasa, pasa
embriagada la noche
tan anónima
como distraída,
tan efímera y
a veces crucial,
exhumando
historias mal nacidas
en su vorágine
visceral,
pasa, pasa desinhibida
y somnolienta
plena de
alardes descerebrados
y de derroches
bien gastados,
pasa, pasa explotada en palabras
y copulando
cromatismos,
demandante y
errante pasa,
pasa barajando
andamios
donde treparse
y abatirse,
pasa, hoy tan
solo pasa la noche
inmolándose en
su estadía,
irresistible e
impertérrita
en su
pervertida insinuación.
Pasa, pasa rozándome
la noche
huracanando todos
los vientos
esos que te
brisan el nombre
en el desván
de todos los ecos,
pasa, pasa
exorcizándome el sueño
imperecedera
en su naturaleza
donde tú, me
habitas excarcelada,
tú, tan dueña
de todos mis tiempos.
foto Antonio Correa
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